El UAV, que recoge muestras y analiza la calidad del agua en tiempo real, estará listo para su comercialización este mismo año. Se trata de un dron de 25 kilogramos de peso máximo en despegue, fácil de usar y transportar, que multiplicará el número de muestras que se pueden recoger.
Indra trabaja además en una embarcación no tripulada que contará con un sistema robotizado para monitorizar la calidad del agua en mar y océanos Madrid, 15 de enero de 2020.-
Indra, una de las principales compañías globales de tecnología y consultoría, en UTE con las empresas gallegas Sixtemas y Adantia, ha probado con éxito el primer dron medioambiental que automatiza la recogida de muestras en ríos y zonas costeras y ofrece información en tiempo real sobre los parámetros de calidad del agua. El sistema estará listo para su comercialización este mismo año.
Esta innovadora solución, diseñada para reforzar la seguridad y protección de los recursos naturales, forma parte del proyecto Mar 2 de la Civil UAVs Initiative, la iniciativa impulsada por la Xunta de Galicia para convertir Galicia en referente en el desarrollo de drones civiles. La demostración tuvo lugar en el embalse de Eiras, que abastece de agua potable a Vigo y otras poblaciones de la zona. La prueba contó con la presencia de los Conselleiros de la Xunta de de Galicia de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, y de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, así como de Patricia Argerey, directora de la Axencia Galega de Innovación.
Dentro del proyecto, Indra se ha se responsabilizado, en colaboración con la empresa gallega Aeromedia, del desarrollo de los medios automáticos de captura de muestras y datos. El sistema ayudará a la Xunta de Galicia a controlar la calidad de las masas de agua de la comunidad y a preservar los ecosistemas fluviales y costeros. Multiplicará el número de muestras que se podrán recoger y aportará una agilidad sin precedentes para detectar cualquier vertido o anomalía. También facilitará la recogida de muestras en lugares de difícil acceso, reforzando la seguridad de los profesionales implicados en estas labores.
El sistema aéreo no tripulado se basa en un multirrotor de hasta 25 Kg de peso máximo al despegue, cuyo sistema de control ha sido optimizado. Dispone de diversos dispositivos y sensores para determinar de forma automática la profundidad y estado del fondo de ríos y costa, medir la altura de la capa fótica – aquella en la que penetra la luz del sol–, capturar y explotar en tiempo real los datos de calidad de las aguas y llevar a cabo su muestreo, tanto a niveles de profundidad concretos como a lo largo de toda la capa fótica. El nuevo dron es un sistema único, que se distingue por integrar un gran número capacidades en un aparato de pequeño tamaño, fácil de transportar y operar. Permite recoger datos y muestras sin necesidad de contar con una embarcación y disponer de ellos de forma inmediata. Su empleo ahorra tiempo y ofrecerá una monitorización de las aguas mucho más precisa.